martes, 21 de agosto de 2007

Carta a mi padre en su lecho

Ay que mis palabras
hicieran el milagro
de las flores
del desierto
y te llegaran
en alas de mariposa
blanca
o a lomo de hipocampo
para que pudieras
elegir

1 comentario:

SECH Londres dijo...

Guiselova,
desde tu abuelo jugando al naipe hasta la imposibilidad de elegir cómo y cuándo irnos, tus palabras me llegan a la médula y más allá
Consuelo